¿PORQUE TENGO PROBLEMAS?

2 Crónicas 20:1-7;12-15

Todas las personas tenemos problemas, pero hay una gran diferencia en la manera en la cual enfrentamos a los problemas. Hoy quiero mostrarles de acuerdo a la palabra, como enfrentar a los problemas. Los problemas vendrán la pregunta es ¿Cómo manejarlos?

No importa que tan grande sean los problemas que tenemos, la palabra de Dios nos da recursos para enfrentar y superar nuestros problemas.

# Una cosa es reaccionar de acuerdo a como nos sentimos en el momento, y otra muy distinta es actuar sabiendo que mi manera de conducirme traerá resultados positivos, soluciones.

2 Crónicas 20:1, eran tres pueblos que venían contra el (Moab, Amón, y otros Amonitas), era un problema grande, eran mayores, parecían insuperables, pero en su forma de responder y contestar nos deja un padrón de cómo podemos enfrentar a nuestros problemas.

# A Dios le interesa ayudarte a superar tus problemas, Dios está interesado en que te vaya bien.

# Necesitas saber es que Dios es más grande que tu problema.

Josafat estaba en un momento donde la amenaza era, te destruiremos, lo haremos con tu familia, tu pueblo, tus posesiones, no dejaremos nada!

¿Cómo respondo a los problemas?

1. Buscar a Jehová: 2 Crónicas 20:3

¿Alguna vez has decidido que buscar a Jehová sería la prioridad en tu vida? Porque cuando lo hagas Dios se vuelve más grande en tu mente, y los problemas se minimizan.

La gente lastimosamente deja como último recurso lo que debería ser primero. Mi primera respuesta ante los problemas debe ser buscar a Jehová!

- Cuando viene el problema lo primero que necesito hacer es decir “Padre…”, e invitarlo a El con todo su poder y devoción a que nos ayude a enfrentar la situación que tenemos por delante.

- Dios desea involucrarse con mis problemas! Y a veces hará que otras personas más se involucren.

2. Ayunó: 2 Crónicas 20:3

El ayuno es un ejercicio espiritual establecido por Dios que trae libertad, que rompe los yugos y las ligaduras de impiedad y opresión, tanto en una persona como en un nación.

Quizá ya venís orando hace un tiempo por algún motivo y no estás teniendo respuesta, es hora de subir la intensidad! Empezá a ayunar.

3. Involucró a los demás afectados a buscar a Jehová: 2 Crónicas 20:3-4

Esto es porque muchas veces usted ya sabe como solucionarlos, y los demás no. Y Dios quiere utilizarte en medio de ese problema a acercar a los demás también a El. Que ese problema sirve para que en tu familia todos empiecen a buscarlo a El, a que vos y tu esposo/a de una vez por todas se pongan de acuerdo y juntos peleen por las cosas que les están creando problemas.

4. Nuestros oraciones deben centrarse en Dios y no en el problema: 2 Crónicas 20:6-7;12

Su oración era sobre Dios, su poder, su fuerza y lo que Dios estaba dispuesto a hacer en sus vidas. Cuanto más hablamos de Dios, más chico será el problema. Resucitará nuestra fe, y eso hará que mis sentimientos y actitudes empezarán a cambiar.

Así comenzamos a enfocarnos en sus recursos, sus virtudes, su gloria, y esto nos llevará a encarar el problema de otra manera, porque yo sé que estando con El soy mayoría. Yo sé que estando con El soy invencible.

# En vez de preocuparte por todo ora por todo!

5. Respondo siendo lleno de su Espíritu: 2 Crónicas 20:14

Ya no respondo con el espíritu de derrota que tenía, con ese espíritu de desanimo y depresión, con ese espíritu de pobreza, o ese espíritu divisionista, negativo, malgastador, ni ese espíritu hipócrita, pervertido o mundano que tenía!

# A veces el problema es una invitación de Dios a que vuelque mi vida hacia El, y allí pueda ser lleno de Su Espíritu para lo que se viene por delante.

6. Actuando tras haber pasado estos pasos: 2 Crónicas 20:15

Una vez que me pongo en orden y de acuerdo con el Señor, empiezo a actuar. No actúes antes que Dios te hable. ¿Qué hago si Dios no me volvió a hablar aún? Hace lo último que te dijo, hasta que te de una instrucción nueva.

#La orden era no temas: ya no encares el problema con miedo, o achicado, o dudando, o sin fe. Entra sin temor.

# Entende que ya no es tu guerra: Dios se toma a pecho el problema que es de sus hijos, y El nos dice “deja a mi cargo hijo mío”.

# Jehová estará contigo (v17)

Conclusión:

Hay problemas que Dios envía, cuando estamos errando en la construcción de nuestra vida.

Hay problemas que son el precio o costo impuesto por Dios, para que se cumpla su voluntad en mí.

Hay problemas en forma de prueba, que sirven para que el poder de Dios se manifieste en mi.